A lo largo del sábado 19 en el IFEJA (Institución Ferial de Jaén) se celebró la «FERIA DE LA FE, para adultos, jóvenes y niños» que congregó a varios miles de fieles llegados desde diferentes puntos de la geografía provincial.
La jornada, daba comienzo a las 10 de la mañana, con la llegada de los dos símbolos de la Diócesis, el Santo Rostro y la Virgen de la Cabeza peregrina. Después de una oración comunitaria, los visitantes pudieron repartirse por las distintas zonas en las que se había dividido esta feria:
¾ La Montaña de las Bienaventuranzas: dedicada a la evangelización y al primer anuncio.
¾ El Parque del Sosiego, donde estaban ubicados los stands dedicados a la litúrgica de la Iglesia.
¾ El Puente del Consuelo, un gran espacio dedicado a la caridad desde todas sus aspectos.
¾ Y la Barriada de la Comunión, como un signo de unidad en el mundo. La unidad de Dios con el hombre y del hombre con Dios.
Los voluntarios de la Delegación de Misiones de Jaén participamos en el stand de Misiones que constaba de una exposición de infografías que Elías Alcalde, Delegado Episcopal de Misiones de Granada, ha ido preparando a lo largo de varios años y que puso a disposición de nuestra Delegación y a quien agradecemos su disposición, así como su visita. Junto con esta gran exposición teníamos distintos materiales de las OMPs: trípticos de las distintas obras misionales, pasaportes misioneros, rosarios, cruces…
Entre las infografías destacar una en la que aparecían nuestros misioneros diocesanos: Carina Fernández, Manuel Ruiz, Antonio García, Ana Cruz y Luis Fernando Criado.
También fue una jornada de convivencia de todos los que conformamos esta Delegación.
Finalizaba la Feria de la Fe con una magna concelebración del clero de Jaén con nuestro obispo, D. Amadeo, a la cabeza en la que se clausuraba la primera fase de la Misión diocesana. En su homilía destacó que «cada Parroquia ha de ser una misión y cada bautizado un misionero». También hizo referencia a la Jornada Mundial de las Misiones –Domund– siendo la colecta, como no podía ser de otra manera, para las Misiones. Al final de la Eucaristía tuvo lugar el gran envío de todos a continuar la Misión, porque la Iglesia es por naturaleza misionera.
